El lugar encantador, sus propietarios: Amparo y Luis, también.
Entras en su jardín y en su casa y parece que has salido del mundo: paz, tranquilidad y belleza.
Ambiente muy familiar.
Y el lugar es centro entre Soria, Zaragoza y Guadalajara; tienes todo lo que quieras visitar cerca y para todos los gustos: monumentos, naturaleza, espectáculos, exposiciones...y la gastronomía, riquisima, al lado de la casa rural, a 1 minuto andando todas: más popular y cantidad, en "Carlos Mary", y, moderna, de autor, con productos de la tierra, en "El Duque"; para desayunar el buen café del Mopal y los churros y bollería exquisita de "Cosas de antes".
Si quieres ricos asados y carne, a Medinaceli "de arriba", 3 minutos en coche, al "Granero".
Estás al lado de la estación del tren, por la que cada día pasan menos líneas y por la noche ni te enteras si pasó uno o dos.
Para dejar el coche sitio seguro y a elegir dónde quieras.
Más que el precio que está muy bien, valoro la calidad y en eso este lugar va sobrado, tanto humano como material. Es un lugar acogedor y tranquilo. Y ya el trato no os lo cuento, eso tendréis que averiguarlo vosotros mismos. Lo valoro con 5 estrellas porque no hay más. Si volviera sin duda me volvería alojar si hubiera sitio.
![5]( "Recensione")
El acceso desde la autovía es fácil y el lugar donde está ubicada la casa rural se encuentra rápido, además dispone mucho aparcamiento al lado de la casa
La casa es sitio tranquilo, acogedor y cómodo y la decoración le da encanto y cierta autenticidad.
Las zonas comunes son amplias y tanto las habitaciones como los baños de las habitaciones tienen bastante espacio y todo está muy limpio ... tengo que destacar que al menos en la habitación en que yo estuve alojado el colchón era de lo más cómodo y descansé estupendamente.
El desayuno está bien tanto en cantidad como en calidad y me pusieron mermelada casera muy rica hecha por la dueña de la casa … eso en pocos sitios lo hacen.
Las personas que lo llevan son personas estupendas y atienden perfectamente. Además te explican lo que puedes ver por la zona y como organizarte. Yo visité lo que me indicaron y me parecieron muy acertadas sus recomendaciones
No puedo poner pegas a mi estancia en ella y he estado bien atendido ………… puedo decir que he estado muy a gusto ¡
Una casa acogedora donde se respira arte, respeto por la naturaleza y la atención de una pareja encantadora. Muy cuidada y limpia con un jardín donde se respira paz. Esperamos volver y repetir su deliciosa mermelada artesanal de ciruelas del huerto.
Lo importante en la vida no es lo material, aunque ayuda y mucho cierto!, es lo sensorial, aquello que siempre genera empatía.
Hoy he vivido una experiencia constructiva y gratificante.Apuesta alto y claro por esta fonda, por este ambiente, por esta esencia vital.
Casa grande y buena, de las de antaño, decorada con muebles antiguos restaurados, muy acogedora y agradable. Regentada por una pareja muy simpática y atenta. Calefacción fenomenal, nada de ruidos, todo genial, estuvimos muy a gusto el fin de semana. Pegada a la estación de tren de Medinaceli, buen precio.
Un lugar ideal para pernoctar unos días en Medinaceli. Tranquilo y apacible, limpio y decorado al gusto de una casa rural con buenos materiales, fiel reflejo del trato que nos dispensaron sus propietarios con una relación calidad /precio atractiva.
Un saludo cordial de Maryna e Ignacio.
Madrid
Estuvimos el pasado verano en "La Antigua Fonda" y en primavera hemos vuelto a repetir. Es una casa en donde el tiempo se ha detenido y el descanso está asegurado. El jardín, el estar situada a dos pasos de la estación, y la amabilidad de sus propietarios, es un lujo para quien viene de una ciudad grande.
Autenticidad, en todos los sentidos... volveremos este verano
Un trato excepcional por parte de Amparo y Luis. Una casa donde se cuidan los detalles y un jardín para pasar toda una tarde leyendo un libro:). Excelente relación calidad/precio.
Ha sido una maravilla.Habitaciones limpias,desayuno rapido y de buena calidad,los dueños encantadores, la casa muy acogedora desde el primer momento,fresquita , con un jardin precioso para descansar...en resumen todo fantastico...
Es una estancia limpia y tranquila, los anfitriones hacen que pases unos días muy acogedores, para volver a repetir.
Muy bonito. Las habitaciones confortables. El jardín fenomenal. Los hoteleros encantadores.
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