Raúl Del Castillo Cuervo
+5
Lugar tranquilo y con amplio parking . Carta variada. Buena calidad de los productos y raciones completas .
Buen Restaurante venta de las de antes almorzamos el típico almuerzo catalán de longaniza a la brasa con pan con tomate y butifarra con guarnición y un porro de vino todo muy rico con producto casero del pueblo,
El servicio expectacular y precios buenos.
Fuimos guiados por las reseñas y acertamos. EL trato excepcional, la comida de calidad y muy buena. La escudella muy buena, el cordero también y la ensalada de queso espectacular... el pan, el allioli, la llonganisa.... incluso hay vi amb porró que con un poquito de gaseosa se rebaja lo justo para afrontar las curvas de regreso a casa. Repetiré seguro. MUY RECOMENDABLE. ahhhh, y pedimos de todo con postres y cafes por 25€ por persona. Calidad precio muy bueno.
Paré de rebote en este restaurante, después de haber hecho varios intentos en los dos pueblos cercanos sin reserva. Llamé para preguntar y desde el primer momento me di cuenta de que esta gente lleva toda la vida en hostelería. El trato fue súper amable y cercano y no solo se preocupan de facturar y ser amables, sino de crear un buen ambiente. Los precios al ser carta están en un precio medio, no me pareció nada caro, y la calidad buena. Comida tradicional y de la zona, en mi caso me dejé aconsejar y pedí el plato del día, hígado de cordero, y fue un acierto.
Buen lugar para hacer un alto en el camino. En mí caso un buen desayuno caliente, con numerosas alternativas, buena carne a la brasa con buen material y cantidad. Un cercano y afable servicio. Espacio para aparcar. En un ambiente de una antigua venta, bien conservada y fotografías extraordinarias. Una grata sorpresa.
Es una venta de las de siempre ubicada en la carretera de acceso a Cornudella.
Conserva ese aire de casa del siglo pasado con los suelos de antaño y una chimenea/barbacoa central magnífica.
Lo mejor es la carne porque la hacen a la brasa y es adquirida en la misma zona.
El trato es correcto y el local tranquilo.
Las raciones un poco escuetas pero ricas y frescas.
Antigua venta de principios del siglo pasado, con un servicio, atención y comida maravillosa.
Gran descubrimiento ya que todo por los pueblos del montsant, un día no festivo, ha sido imposible encontrar un lugar donde comer.
Sin duda lo recomiendo 100%.
Comida casera de toda la vida y carne a la brasa hecha con mucho amor.
Buena comida casera. Relación calidad precio: bien. A mi gusto, quizás un pelín caro (treinta y pico por cabeza, un sábado, ...) pero hemos pillado un buen vino, cafés, etc... Más o menos todo bien. Recomendable (aunque no algo super)
Lo recomiendo 100% todo buenísimo muy acogedor las camareras súper agradables y aparte luego puedes hacer la ruta de los pueblos del priorato que son preciosos precio y calidad está muy bien
Sitio acogedor. Muy buena comida. La atención es excepcional y aconsejan muy bien. Sin duda volveremos!!
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