Estuvimos en un reservado que nos prepararon para comer en una casa histórica y muebles de época todo muy cuidado.
La cocina tiene una calidad excelente, la preparación de los platos está a nivel Michelin. Y la bodega de lo mejor que hay en la zona. Pedimos Numanthia el referente de los tintos de España. El trato de David marca la diferencia, ganas de volver!
Jose Antonio Rubio del Amor
+5
Muy buena experiencia! El servicio muy atento, rápido y agradable. La comida muy rica, sobre todo la que nos recomendaron y raciones de buen tamaño perfectas para compartir. Me encantaron las sardinas. El chuletón de vaca está poco hecho y te ponen una piedra para que tú te lo cocines a tu gusto, muy bueno también. Punto negativo: 4,5€ el pan sin haberlo pedido pero bueno. En general es caro pero ¿merece la pena? Yo creo que sí. Adjunto fotos y cuenta.
Todo perfecto.
-La atención de los chicos al recomendarnos y tomarnos nota fue perfecta.
-La comida muy buena, nunca habíamos probado el pastel de puerro y nos sorprendió muy gratamente. La presa y el helado de queso muy ricos también.
Recomendamos el sitio sin lugar a dudas.
Fuimos un grupo de 11 adultos. La atención es buena y los camareros muy amables. La calidad de los productos es buena; destacando la chuleta de vaca, presa ibérica, pulpo y las ensaladas de ventresca y tomate con cecina. Como postre me quedo con el arroz con leche. Sin duda, repetiriamos.
Habíamos visto el lugar, y nos había llamado la atención, porque hablaban genial de su cocina. Así que tras visitar la Bodega de Numanthia, teníamos concertados con la propia bodega, una experiencia gastronómica, que se disfrutaba en este lugar. Nuestra sorpresa fue de 10, nos pusieron 5 platos diferentes, para compartir, junto con una botella de Numanthia, un postre y un café.
Ni que decir tiene, que tanto David, como el resto de los camareros, no pudieron estar más pendientes, amables y todo servido a un ritmo excelente.
Felicitaciones, por un lugar tan extraordinario y una cocina espectacular.
Deseando volver por allí en cuanto volvamos a Toro
Angela Rodríguez Toribio
+5
El sitio es fantástico, hemos comido de lujo y siguiendo la recomendación del camarero. Por cierto el personal muy amable ,simpático y profesional. Si volvemos de vacaciones repetiremos.
Trato cercano y agradable. Pedimos sardinas, pulpo zamburiñas, como postre helado casero de pistacho y canutillos de Crema. Todos los platos sorprendentes por su mezcla de sabores. Servidos con rapidez y amabilidad. En un lugar acogedor.
Experiencia culinaria muy recomendable. Si estás en Toro es muy buena opción. Es mejor reservar previamente.
Si pretendes comer guiado por tripadvisor, te sorprenderá encontrarte, con bastante probabilidad, en un comedor que tienen al otro lado de la calle. Preparaos a esperar lo vuestro para comenzar a comer y armaos de paciencia para terminar. Y eso habiendo reservado. El local original apenas dispone de espacio para acomodar 4 mesas, mi cocina es bastante más grande. Es un calvario para los camareros, que son quienes tienen que cruzar la calle con la comida, empujar una pesada puerta, desenrollarse de una cortina y, en ocasiones, subir una escalera angosta y empinada. Meten mesas de terraza hasta en los espacios de paso. Está claro que al dueño únicamente le preocupa hacer caja, de ninguna manera piensa en su personal o en la comodidad de sus clientes. La comida?, sin más. Tal ver llame la atención el tamaño del pulpo, sin embargo, hace años que no existen cefalópodos tan excelsos en el Cantábrico, con lo que su sabor es como el espacio en el local: brilla por su ausencia
En La Esquina de Colás se come de fábula. Buenos productos con un toque de modernidad, riquísimos y bien presentados. Además, el personal no puede ser más amable. 100% recomendable. 😊
Tienen dos comedores uno donde el restaurante principal y otro en otra casa cruzando la calle.He probado varios platos,todos de extraordinaria calidad.
Muy buena bodega a buen precio y extensa.
El servicio muy bien, atentos y todo muy limpio.
La comida está muy rica y bien elaborada. Quizás la relación calidad precio un poco justa, pero entiendo la inflación de esta época. Es un sitio muy pequeño y se convive con gente de pueblo que elevan la voz de vez en cuando. No hay mucha privacidad. La ensalada de pulpo buenísima y la carne guisada también. Sitio recomendable
Fuimos a la Esquina de Colás porque nos lo habían recomendado y realmente fue un acierto porque nos encantó todo. Cierto que es un local muy pequeño pero acogedor y con pocas mesas. Cuando llegamos ya era bastante tarde y nos atendieron igualmente muy bien. Nos encantaron esas Sardinas preparadas en una especie de escabeche que ellos mismos preparan, también la ensalada. Pero lo que más nos gustó fue el trato recibido por un gran tipo, paisano y Asturiano para más señas. Por supuesto con muy buena carta de vinos. Un acierto.
La comida buena y el servicio atento y agradable, pero una espera excesiva y un sobreprecio de 5 euros mínimo por plato. Las cañas rácanas.
Espectacual sitio en toro si te gusta el vino tanto de la propia zona como de otros países, trato y recomendaciones de 10 👌.
Lo recomiendo al 100% " buen material".
No hace falta irse muy lejos para comer, teniendo lugares como éste tan cerca. Espectacular.
Comenzando como entrantes el pan de cristal, sardina y jamón; pata de pulpo con panceta y Zamburiñas, todo sabrosísimo.
Como segundos individuales: Bacalao al Pil Pil, y Solomillos, deliciosos. Todo ello regado por por un buen tinto Latarce.
No pudimos irnos sin probar el arroz con leche y un gran descubrimiento, el helado de pistacho; uno de los mejores postres que he probado.
Destacar el gran trato en todo momento por parte de los camareros, muy atentos, profesionales que hicieron de nuestra visita perfecta. Seguro que volvemos
Situado en pleno casco antiguo de Toro, un lugar donde se disfruta de la buena comida sin dudarlo.
Las sardinas un clásico, el pulpo con panceta, tremendo.
Puedes disfrutar de vinos de la zona, y de vinos prémium por copa, para maridajes espectaculares.
Muy recomendable, atención genial, repetiremos.
100% recomendable , fuimos a comer el pasado sábado , no había sitio asique nos pusimos a fuera de lo barriles y nos gustó tantísimo que pedimos sitio adentro para el día siguiente . Todo un acierto el steak tartar de solomillo así como el pulpo y la sardina ...no tengo foto del pastel de puerro pero estaba delicioso y para terminar el helado de turrón para salir rodando hacia el hotel , es una locura ...eso sí hay que ir con reserva para comer ...sino te toca fuera en los barriles ...pero como todo está de lujo es un mal menor ..DISFRUTAR ❤️
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