Restaurante que vale la pena repetir cada domingo del verano y así llevamos 2 años, comemos y después a la playa con la digestión de sus ricos vinos de esa magnífica cava.
Aunque en nuestra opinión la completaría con más vinos locales o de cercanía, ya que tenemos grandes bodegas y vinazos.
Los platos están ricos, bien presentados, se nota que es un producto de alta calidad que lo trabajan bien y con cuidado.
Fuera de carta siempre tienen más exquisiteces que te hacen dudar lo que pedir.
Su Climatizacion interior es perfecta y envidiable, más en esta ola de calor.
Seguiremos reservado y recomendando.
Restaurante con salón y terraza con un ambiente y decoración bien cuidada.
Calidad-precio altos pero justificados por esa calidad y trato a todos los productos que sirven.
Atención del personal excelente con un trato muy afable y profesional.
Fácil aparcamiento y acceso sillas de ruedas.
Abstenerse vegan@s y celiac@s avisar con anterioridad.
La comida estaba bastante buena y el sitio es bonito y agradable pero esperábamos algo más de calidad en algunos platos, por ejemplo en el tartar de salmon, y también algo más de cantidad, especialmente en la carne. Pedimos risotto, carne, tartar algunos platillos individuales y un postre. Íbamos 4 personas y pagamos 45€ cada uno.
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