EL ÚNICO PERO, EL AMBIENTE: No por temas de atención y servicio, fueron muy complacientes, atentos y correctos. No obstante nos tocó una mesa detrás de fumadores. Quizá deberían de estar atentos de cuidar el ambiente ya que el humo es muy molesto y estropea el ambiente de la comida.
A parte de ello, es un sitio recogido, familiar con buen ambiente y comida casera de calidad.
Pedimos entremeses, fingers de pollo con patatas , guisado de ternera y tapa de chorizos para compartir: las patatas crujientes y en su punto, los finguers quizá algo secos pero crujientes, el guisado muy bueno en su conjunto, los chorizos muy jugosos pero sin ser grasos. Y cómo no, de postre tarta de queso, riquísima y jugosa con gran sabor y acompañada de sirope.
Empecé con una tapa de trucha, era un montadito bastante bueno. De entrada pedí un montadito de solomillo con cebolla caramelizada, muy rico igual. De plato principal me pedí un pulpo a la gallega con papas, no soy muy conocedor de ese platillo pero para mi estuvo super bien, buen sabor del aceite de oliva, buena cantidad de pimentón y sal. La textura del pulpo buenísima y tambien de las papas! Claramente no lo recomiendo para plato principal sino para pedirlo al centro, pero al momento fue la opción que mas me agradó y por eso lo pedí. Cerré con una tarta de queso, cumplió bien para limpiar el paladar. Excelentes precios, lo recomiendo ampliamente!
Un gran lugar muy céntrico y muy cómodo!
La atención del mesero fue muy cálida y amable!
Lugar ideal para comer. Terraza en calle peatonal, menú del día muy rico, platos abundantes y a muy buen precio! El servicio encantador, muy atento y amable. Super recomendable!
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