Super buena experiencia, fuimos a cenar un día entre semana y estábamos prácticamente solos. Muy tranquilos, el trato del personal fue correcto y la calidad de la comida fue excepcional.
No me importaría repetir en el futuro.
Comimos muy bien por lo que realmente es un restaurante recomendable pero salimos un poco desencantados por la atención de los camareros. No fue un problema de que fueran maleducados o desagradables, para nada. Pero si hubo problemas de coordinación, errores con las comandas, tiempos de atención, a unos comensales les traen las bebidas a otros no, hay que buscarles para que te atiendan... Ese tipo de cositas que afean un poco la experiencia de comer fuera. Por lo demás todo fenomenal y todo muy bueno. La cocina por encima de la media aunque los postres quizás un poco demasiado empalagosos
Buenos platos. El personal muy amable y atento, la sala es acogedora aunque no muy grande, todos lo que probamos muy bueno lo que algo caro si no vas con el descuento del tenedor, lo mejor la presentación de los platos, los huevos rotos normales la verdad me esperaba más sabor, la coca de jamón me paso igual, el civet de ciervo realmente bueno la carne se deshacía, el Magret de pato normal, lo que nos gustó el detalle de traer todos los platos en una bandeja y enseñar y explicar cada uno de ellos, todos ellos muy ricos.
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