Estoy hasta los huevos de que me tomen el pelo por comer o cenar en Barcelona. Y venir a casa vuestra, es todo lo contrario. Buen hacer. Buena comida. Te sientes en casa desde el segundo 0. Calidad. Precio justo. GASTRONOMIA HONESTA. Gracias. Ojalá siga habiendo lugares así por mucho tiempo.

Restaurante en la parte alta de Canyelles en la montaña. Yo qué vivo en el centro de la ciudad me ha gustado la tranquilidad de la zona. Zona residencial y con muchas areas verdes y parque al lado para peques. Teníamos reserva para cumpleaños y aunque tuvimos qué esperar un poco al principio ha valido la pena. Trato inmejorable de nuestros camareros. Como si fueramos de casa. Alberto muy simpático atendiendo nuestras preguntas y dudas nos hizo una gran presentación de las tapas para compartir y de los segundos. Especial mención qué disponen de pescado fresco del día. Ayer era rodaballo de 1 kg para compartir entre 2 personas. Pedimos para compartir: croquetas de pollo, jamón y calamares, pulpo, zamburiñas y patatas bravas. De segundos callos con cap i pota, Bacalao, chuleton, costillas y arroz con secreto (Fondo de carne) y arroz con marsico. Yo puedo decir qué los callos buenísimos. La salsa un Poco picante pero soportable. De postre pedimos casi toda la carta: flan de Huevo, lemon pie, cheesecake, sacher y crema catalana. Hemos decidido qué volveremos. De verdad qué ha sido un placer degustar la comida y recibir la calidez del servicio de camareras y camareros