Estábamos dando una vuelta por el centro comercial y nos decantamos por cenar aquí, en base a buenas experiencias pasadas en esta cadena.
Esperamos fuera hasta que una trabajadora nos atendió y nos dió mesa dentro, lugar donde se está a mejor temperatura.
El local es espacioso y minimalista, al estilo de los otros restaurantes de esta cadena.
Nos sirvieron las cartas y ambos nos decantamos por el Oyako Don. Mi pareja tiene problemas al comer gluten y otros alimentos, y la trabajadora le comentó que podría preguntar a la cocina si llevaba alguna intolerancia, a lo que respondieron que no. Además le comentó la camarera a mi pareja que le podían hacer el pollo a la plancha del plato sin rebozar, a lo que ella dijo que perfecto.
Los platos llegaron rápido, bien cocinados y presentados. Como acostumbra a ser en esta cadena, eran contundentes y buenos, así que punto positivo.
A nivel del ambiente hay que decir que nos aconsejaron comer dentro del local, ya que con la calor de estos días se estaba más cómodo dentro, además fue un acierto ya que se estaba muy tranquilo y no había mucho ruido, otro punto positivo.
Recalco el trato del personal, bastante atento y cercano, sin duda es una actitud que como cliente habitual de esta cadena valoro.
Sin duda volveremos a probar más platos que nos dejaron con ganas!
La comida buenísima y las camareras super amables, en especial Laura que fue la que nos atendió. Nos pedimos el menú de entre semana y ademas de muy buen precio todo esta super rico. También me gustó que tienen muy buenas opciones vegetarianas. 100% recomendable :)
Vale la pena hacer menú, te sale barato y delicioso, pero también hacer carta
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