Fuimos a comer sin reserva en septiembre y nos atendieron muy bien. Pedimos una ración de ensaladilla rusa que la verdad era casera y muy buena, los calamares también súper buenos, las navajas era muy pequeñas, y los huevos rotos con jamón muy aceitosos. Por lo demás nos trataron genial. Además tienen zona de bar con tapas.
Es un lugar que conozco de hace años y es una pena porque era genial y ahora la calidad ha bajado bastante o al menos, el sabor de la comida es muy soso, por eso pongo 4 estrellas porque se que dañan mucho estas reseñas.
El servicio de camareros de verdad que son lo más secos que he visto en mi vida, yo entiendo que trabajar cara el público es muy duro pero ninguna sonrisa amable recibimos y todo sin ganas. Quizá la empresa debería cuidarles un poco mejor.
Los pinchos si es cierto que están muy buenos y la presentación está bien pero luego el sabor todo está soso.
Lo que más me disgustó fue pagar más por dos licores de rubavieja que por toda la comida que pedimos. Os pasáis un poco bastante.
Espero que trabajes un poco más con humildad y agradeciendo el cariño que todos los clientes os damos cada año.
Bar con sombra en buena situación al lado de la playa.
Nos a atendido un chico joven moreno muy simpático, según habíamos pedido le ha servido al perro agua en un cuenco sin pedírselo y ha sido un gran detalle.
Las patatas con alioli que hemos pedido muy ricas, no son congeladas.
Desde luego lo recomiendo!!
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