Al lado de la estación, de fácil acceso y de aspecto discreto en su exterior, sorprende su cuidado interior con paredes de ladrillo visto, altos techos y mesas amplias suficientemente separadas para mantener la intimidad de las conversaciones durante las comidas. Desde alguna de las mesas se puede ver el horno de arcilla en el que se realizan alguna de las preparaciones al tiempo que se observa cómo realizan el corte de las piezas de carne que luego se sirven. El servicio es muy agradable y competente, rápido y eficiente, el menú que se sirve ofrece cantidades óptimas y excelente preparación y presentación. La acústica es muy buena y la terraza tan bien equipada que parece imposible que pudiese lograrse un espacio tranquilo al estar situada junto a las vías del tren. Finalmente decir que la limpieza es exquisita y que la relación calidad-precio-servicio inmejorable.
Sitio excelente.
Nos recomendaron entrantes fuera de carta y fue todo un acierto. Níscalos con huevo de corral y mejillones pequeñitos con chorrito de nata. El solomillo de ternera muy bueno también. Los postres absolutamente caseros.
Personal muy atento.
Estuve este finde semana allí. Llegue a ellos por las reseñas y fue todo un acierto. La relación calidad-precio es inmejorable, todos los platos ricos, a ninguno se le pudo poner un “pero” a pesar que pedimos muy variado en la mesa. Pero mención especial al servicio, personas amables y profesionales. Me dejé aconsejar en cuanto a la ubicación de la mesa y no pudimos estar mejor. Volveremos seguro!!!
Ubicado junto la estación de tren, este elegante restaurante ofrece una buena carta regada con buenos vinos de precios más elevados de lo normal. Materia prima excelente, buenas cantidades y servicio inmejorable. En las fotos Judiones de la Granja, Cochinillo y Setas de cardo.
Andrea Pontesta Inojosa
+5
Todo lo que hemos pedido nos ha gustado mucho, el solomillo exquisito, las chuletillas jugosas en su punto, los espárragos gratinados han sido un acierto.
En cuanto al postre, nos hemos decantado por la tarta de queso, casera y con mucho sabor.
Recomendable y repetible sin duda.
Esther Dominguez Perez
+5
Menú buenísimo. Raciones abundantes. Los camareros super amables
Comida española con un toque de autor. Todo delicioso, especial, bien presentado y bien atendido.
Ya había comido aqui un asado a la carta y me encantó el restaurante, esta vez he ido a comer el menú del día, lo que ellos llaman el menu ejecutivo y aunque su precio es alto para un menu del día, lo cierto es que es como comer a la carta, son 4 primeros y cuatro segundos a cada cual mejor y una extensa carta de postres caseros, aunque en mi caso que elegí el tiramisú como especialidad, no me gustó, lo vi muy industrial aunque digan que es casero. Los callos con garbanzos de primero buenisimos, poca cantidad como a mi me gusta pero bueno y el entrecot de segundo muy bueno también. Totalmente aconsejable.
Todos los platos estaban deliciosos y tenían una pinta espectacular. Los postres buenísimos y caseros. El lugar muy tranquilo y acogedor. Personal muy atento y amable.
Alex García del Valle Méndez (AlexGV)
+5
Me encantó el restaurante. El sitio muy bonito, sobrio, con un toque rústico. Un ambiente muy tranquilo y música agradable. Tiene terraza. El servicio, muy bueno. Nosotros pedimos el menú del día y estaba riquísimo todo. Acertamos también con el vino. Tienen horno de leña, y por lo que me dijeron, se pueden encargar asados. El precio considero que está bien. Fueron 20 euros aproximadamente, con aperitivo, dos platos, postre, vino y agua y dos cafés. Y te invitan a chupito. Volveré seguro.
Grata sorpresa la de este restaurante. Ubicado en la antigua cantina de la estación de San Lorenzo del Escorial (al pie de la vía), el local ha sido remozado dejando un amplio salón comedor con decoración sencilla que resulta muy acogedor. Tanto la iluminación como una música tenue contribuyen a crear un ambiente magnífico para cenas en pareja. El servicio, de lo mejor que he visto en los últimos tiempos. Rápido, atento y amable.
En cuanto a la comida, productos de mercado de buena calidad elaborados y presentados de forma más que correcta. Buen detalle los aperitivos servidos mientras traían los platos. Las alcachofas confitadas a la plancha estaban espectaculares (algo pasadas de sal) y el bacalao Skrey al pil-pil fue algo mágico.
Carta de vinos concisa pero suficiente y con posibilidad de pedir botellas de formato pequeño (375-500 ml). Buen surtido de postres. Para volver.
El restaurante es precioso y está decorado con muy buen gusto. El servicio es muy atento y eficaz. La comida está rica, muy clásica y bien preparada, aunque esperaba más de la carne (normal, no espectacular) y de las zamburiñas, que al estar gratinadas pierden sabor. Está muy bien para una cena romántica pero por el precio no lo recomiendo para ir con amigos.
Coincidimos con una familia con 3 niños bastante maleducados que hablaban a voces y no nos dejaron disfrutar de una comida tranquila, pero eso no es culpa del restaurante
Un buen restaurante para comer o cenar. Sorprende la ubicación, al lado de la estación de tren, pero tiene la ventaja de que no hay problema para aparcar.
La atención es muy buena, y el local acogedor, aunque podría mejorar.
Recomendable, croquetas y boletus muy buenos como entrante. El queso crujiente no está mal, aunque no es una maravilla. Las cocochas de merluza me han decepcionado, me esperaba más, pero el lenguado a la bilbaína estaba buenísimo. El tiramisú de postre está buenísimo también.
En resumen, un buen restaurante, aunque hay algún plato que tienen que mejorar.
Buena comida, buen trato y buen precio. Está pegando a la estación de tren de El Escorial. El sitio es agradable y el trato es muy bueno. Hemos cogido el menú ejecutivo que por 18.5 ofrece 4 primeros y 4 segundos más postre con bebida incluida. Todos los platos tenían una pinta increíble. De segundo hemos pedido ternera que de sabor estaba fenomenal pero se les ha pasado un poco. En los postres había mucho dice elegir y todo con muy buena pinta. Recomendable sí estás por la zona y no sabes donde comer.
El trato excelente y la comida riquísima, quedamos encantados primera vez que fuimos y vamos a repetir, fácil de aparcar y muy bonito el restaurante con un ambiente tranquilo y amable.
Me ha encantado este bonito restaurante, antigua cantina de la estación de tren del Escorial. Personal atento y profesional. Salón muy bonito y elegante. Y comida buenísima. Todo lo que pedimos estaba muy rico, con sabor y bien cocinado. Detalle de aperitivo al sentarte y chupito para acabar. Volveremos sin duda.
Reservamos por casualidad y nos encantó, trato fabuloso, cocina muy rica, un almuerzo perfecto. Gracias, repetiremos.
Muy buena atención, restaurante de categoria en el escorial, os cuelgo alguna foto, calidad precio optima para la zona, quizas un pelin caro, habia alguna cosa en carta que no tenian pero por lo general muy bien, limpio y con medidas covid muy buenas.
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