Un sitio bonito cerca de la playa, pedimos una paella de marisco y la verdad que nos encantó, también la ensaladilla Chema es un tanto original la versión y eso nos gustó. El personal súper servicial, nos aconsejaron muy bien, fueron amables, simpáticos y cercanos. El dueño nos atendió muy bien. Un sitio que se come con calidad y lo que más valoro es lo cómoda que te hacen sentir por su cercanía. Sin duda cuando vuelva de visita iré de nuevo a probar otros arroces de la carta.
![5]( "Recensione")
Acudimos gracias a una reseña publicada en Instagram donde decían que las bravas cruji con mojo verde eran excelentes. Realmente nos lo parecieron, con ese toque crujiente, ese punto salado y las dos salsas riquísimas.
También pedimos la famosa ensaladilla, que te la traen deconstruída en un vaso grande y lo vuelcan delante tuya para mezclar todos los ingredientes con los chips de verduras. De sabor está muy rica, pero para mi gusto trae demasiados chips.
Pedimos también un arroz de pulpo y tenía un sabor muy concentrado a pulpo, muy bueno, además puedo decir que en la paella había casi la misma cantidad de arroz que de trozos de pulpo, por lo que a 14 euros la ración, es un precio más que razonable. Pidiendo una paella para 2, salen 3 platos de arroz.
Una pasada también los postres, pedimos la milhoja invertida, el coulant de turrón y la esfera de chocolate con menta y estaban todos riquísimos y con una presentación excelente.
En resumen: un sitio muy recomendable. 73 euros nos costó todo lo enunciado anteriormente (para 3 personas).
Sitio mítico y de calidad en Guardamar. Un seguro si quieres comer bien.
Una buena carta para todos los gustos, un trato bueno y una calidad excepcional.
Recomiendo el arroz con bogavante, espectacular sabor y las raciones sobradas para no quedarse con hambre.
Como todos los años; volveré.
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