Fuimos ha hacer un pedido para llevar y no tardaron mas de 15 minutos. Mientras lo hacian nos dieron un aperitivo. La comida estaba muy rica, pollo agridulce y arroz frito con ternera. Añadieron salsa de soja y mas agridulce, super rico. Muy maja la chica y muy atenta. Repitiremos
Comida clásica y de muy alta calidad. Ambiente tranquilo y elegante. Precios moderados y opción de menús cerrados por 20-30 euros. Especialidad en verduras, como los repollos rellenos y alcachofas fritas (en temporada). Una elección segura. No me cansaré de ir.
Había poca gente, es una pena, porque el local está bastante bien y tiene un buen aparcamiento privado.
Ellos son muy amables, el local estaba muy limpio incluso en detalles donde muchos no se fijarían. El WC no lo puedo valorar porque no entramos ninguno de nosotros.
La comida estaba muy bien en relación calidad y precio. Destacable la frescura de las carnes, y la ligera tardanza en servir fue debida a que se elaboraban los platos en el momento, puesto que se oía el sonido de los salteados en wok desde nuestra mesa.
Seguramente volvamos y repetiremos.
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