El ambiente es encantador y justo frente al puerto de Tarragona.
Pero lo que realmente se destaca en este lugar es la comida. Cada plato que probé fue una obra maestra culinaria. Los ingredientes son frescos y de alta calidad, y la presentación es impecable.
Recomiendo encarecidamente probar el plato estrella de la casa, la Milanesa, excelente.
El servicio merece un elogio especial. El personal es amable, atento y con conocimientos sobre la comida.
Un lugar de puerto para cenar (mejor que comer por el calor) aunque tengan muchos ventiladores puedes morir asado a mediodía.
Los rebozados están muy bien. Las raciones compensadas en relación calidad precio.
No es caro en general.
El pescado no siempre es fresco según lo que pidas. La sepia en nuestro caso un poco seca.
Juegatela mejor con los moluscos, chopitos, calamares y demás.
El pan muy bueno y como en todas partes de Cataluña, lo cobran aparte.
Recomiendo sorbete de mandarina.
La atención siempre muy grata.
Llevamos yendo muchos veranos.
Recomiendo reservar porque en verano eso es el camarote de los hermanos Marx.
Para notar menos el pescado congelado pide zarzuela. La parrillada es más Cantosa.
En principio es una marisqueria de puerto pero he visto gente adulta que va al lugar y pide macarrones con tomate y lomo con patatas para toda la mesa...
Cada loco con su tema.
Buena atención, muy rica comida. La porción es mucho para uno poco para compartir.
El entorno invita avistar el puerto, el museo marino y el barrio puerto.
Es es especialmente económico pero se puede permitir.
Está en el límite de los precios Nac&Pop...
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