Primera visita a Vilanova i la Geltrú. Iba con una amiga. Le gustó el aspecto exterior del lugar.
Paramos a las 15h40, nos cogieron a pesar de la hora.
El gazpacho de maracuyá una delicia.
Las vieiras, un regalo para el paladar.
El tartar de salmón, gustoso, fresco, muy rico.
Los postres: tarta de queso y coulant de chocolate blanco...❤️❤️
El responsable del local, muy amable y servicial.
Y el camarero que nos atendió, Rubén, además de guapisimo, buen profesional y atento.
Volveré seguro.
Fui pues me dijeron que habían contratado al cocinero del ya desaparecido Restaurante Marina que me gustaba mucho. La verdad que no me defraudo el Pedro. Menú sencillo creo que eran 16€ por persona el sábado. De primero pedimos mejillones (espectaculares) y de segundo me pedí bacalao y rico. El entrecot que pidió uno que venía con nosotros espectacular. Y dos se pidieron la fideuá y venía ración como para cuatro personas!!!! El postre que decir la tarta de queso la pedimos con nata ufffffff que rica!!!!
Por cierto si podéis pedir las bravas no pude hacer foto pero geniales… sobre el picante a gusto de cada uno…. Para unos picaba y para otros no….
Seguro que volveré a probar más cosas!!!
Sitio centrico en Vilanova, cerca de la playa.
Pedimos de picar unas bravas (ojo que pican!, sino pedir salsa aparte) y una fondue de camembert deliciosa.
Para comer pedimos 3 arroces: Negro, Caldoso de bogavante y Arroz (paella) con gambas.
Así como el pica pica me sorprendió los arroces me parecieron muy suaves, con poco sabor y potencia.
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