Un sitio para repetir, de hecho, siempre que voy a Zaragoza, no me lo perdono.
Se come rico, diferente, barato e tranquilo. Eso sí, acordaos de reservar mesa.
Podéis pedir lo que más os guste de la carta, pero las pencas de acelgas tienen que estar en vuestra mesa.
Nosotros no cenamoslas pencas, pimiento relleno de bacalao, una croqueta de cocido y otra de ajoarriero, berenjenas con mostaza y miel y la trastiburger.
El trato es cercado, sitio pequeño, pues familiar.
De los sitios más recomendables de Zaragoza.
Bar restaurante que mima mucho a su clientela. La atención por parte de Jorge es siempre de diez.
Tiene buena barra para picar algo o almorzar y siempre tiene un buen plato del día a modo de menú.
En esta ocasión optamos por unas alcachofas con foie y un cachopo.
El cachopo de los mejores que he comido nunca.
Además de todo, no se va de precio.
La única pega, si se puede considerar así, que hay que reservar si o si, pues suele estar lleno.
Un sitio al que nunca me canso de ir. Comida riquísima a un precio muy bueno. Imprescindible probar el volcán de morcilla y su tarta de chocolate
An error has occurred! Please try again in a few minutes