De mis sitios favoritos en Santiago, de los que yo cogería el coche y haría kilómetros por comer en él.
El mejor menú degustación que he tomado yo en Santiago, incluyendo algún estrella Michelín.
Local pequeño y acogedor (por la decoración y por la gente que allí trabaja), donde es muy conveniente reservar.
Cocina donde se fusiona la cocina peruana y gallega, con toques orientales.
Cómo la carta varía tanto es difícil recomendar platos, aunque si veía hummus, ceviches o tarta Tres Leches son opciones seguras.
Local precioso, decoración muy cuidada y acogedora.
El menú degustación es un acierto porque puedes probar todos los platos de la carta (al parecer cambia cada 2-3 semanas) y terminas satisfecho.
Son súper atentos, te explican cada plato y el local no es muy grande por lo que la atención es bastante personalizada.
Una fusión peruana-gallega sorprendente. Los sabores son perfectos, ni muy fuerte ni muy suave, ni muy dulce ni muy salado.
Se siente la calidad en el producto y todo combina muy bien.
Una experiencia deliciosa y calidad precio muy bien.
Volveremos! Gracias!
Un peruano con influencias gallegas de lo más recomendable. Antes tenían opción de carta y un menú del día además muy “apañado” no demasiado caro, además del menú degustación. Pero últimamente solo ofrecen menú degustación, lo que es una lástima, porque no siempre te apetece eso. De todos modos los platos están muy buenos y hacen pisco sour impresionantes.
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