De este lugar me encanta la ubicación enfrente del parque, el ambiente tranquilo, y sobre todo, el café. Esta impresionante. Hoy desayuné una barra de pan de masa madre con un tomate confitado, ambos ingredientes muuuy buenos. Quizás los precios son un poco altos pero me encanta este lugar.
Me llevé una muy grata sorpresa. No sé si es porque fui con bajas expectativas tras leer algunos de los comentarios, pero mi experiencia en este sitio fue muy buena y sin duda repetiré.
El café está bien, pero destaco la comida. Pedimos la focaccia, un sándwich, el cheesecake y la tarta con melocotones. Todo delicioso y los postres sin gluten ni azúcares refinados. El trato por parte de los chicos fue excelente. Precios algo elevados, pero acordes con el área y otras cafeterías de especialidad.
No le pongo 5 estrellas por el calor dentro del establecimiento y porque no tenían varias cosas de la carta cuando apenas eran las 12:30.
Magnifico. Venimos casi todas las semanas. No es barato, pero no hay otro café en todo Madrid en que todas las semanas cambien la carta entera y así tengas siempre algo nuevo que probar. Y menos con platos así de elaborados. Además como no permiten ordenadores no tienes el sitio lleno de gente que se cree que una cafetería es un WeWork y está obligada a darles wifi y dejarles acaparar una mesa por horas. Un placer.
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